martes, 7 de abril de 2015

Raíces.



P.D.

Mi papá vino a la ciudad. ¿Yo? emocionadísima por que iba a tener la oportunidad de platicarle todo lo que he estado haciendo, las cosas interesantes que he encontrado el cortometraje que hice en tres días... Cuando llegué a verle estaba borracho con dos "amigos" suyos, los cuales lucían por demás incómodos, supongo, por mi llegada al restaurant-bar, donde amenizaban la noche tres mujeres con cuerpazos. Una vez se fueron mi papá se dedicó a decirme "Ay, que gorda estás", "¿Ya ves? así trabajarías ahorita si hubieras estudiado música" "tienes una voz muy chiquita" como si nunca me hubiera oído cantar.... repite todo una y otra vez, principalmente aquello que hiere... Me recuerda la vez en que durante tres días no me dejó dormir recriminándome algo que había hecho, y se ofendió por que a la tercera noche me salí a la calle a buscar otro sitio donde conciliar el sueño. Fue un infierno como cada una de las veces que me tocó estar con él borracho, como reclamando que no sea justo lo que él desea.
En fin, su visita fue un desastre, estuvo tomado desde el primer hasta el último día que estuvo aquí, sin embargo esta experiencia me llevó a un sitio donde por fin encontré respuestas.

Para poder explicar lo que entendí con la última visita de mi papá debo hacer primero un análisis de los comportamientos y las conductas nocivos de mis padres durante mi crecimiento, con el fin de poder determinar las que yo creo que fueron clave para desarrollar este trastorno.


Antes de comenzar quiero hacer saber que hubo tantas cosas buenas como malas, esto es únicamente para buscar las raíces de mi trastorno, por lo que defiendo con mi vida que mis padres son excelentes personas y que todo esto fueron sólo una serie de errores que me incumben por que marcaron mi vida de una u otra manera.




Mi Padre:

1.- Cada vez que está ebrio (hasta la fecha) le sale lo que yo gusto por llamar "Mr. Hide". Un hombre que desde su percepción es perfecto, por lo que nadie le llega a los talones. Chingón como ninguno. Es por eso que cuando no habla de sus hazañas como el excelente profesionista que de hecho es, de lo mucho que lo buscan y lo bien que le va, entonces habla de lo que tú no sabes sobre todo lo que él sí, y de todo lo malo que eres para todo lo que otros son buenos, por lo tanto, "estás mal" (frase que repite continuamente durante sus borracheras precedido de dos o tres "no"). Cuando era niña me tomaba muy en serio a Mr. Hide, lo que me generó trastornos en la percepción de mi misma, pensarme diferente a como soy, obsesionarme por mi peso, por ser una estrella o una mujer de negocios al grado de basar mi carrera y mi vida en ello sin llegar a cumplir ninguna, auto-saboteándome cada vez que veía una oportunidad de realizar sus sueños de éxito. Aún así me dice que no tomo dirección. ¿por qué no se vale que yo tenga la mía? Por supuesto nunca le he expuesto esto porque cuando está sobrio no hay cuestionamientos al respecto.

2.- Evitar temas pláticas es algo que mi papá sabe hacer muy bien, pero no se si le pasa sólo conmigo o con otras personas también. Nunca he podido platicar con él de temas que me gustan, por que pierdo su atención a los 15 segundos, me da la impresión de que me menosprecia mucho y me cree una inútil o inferior. Esto me ha hecho poner exagerada atención en lo que los demás puedan pensar de mi, tengo una especie de 'paranoia' en la que pienso que la gente me odia, les doy asco, les caigo muy mal, están enojados conmigo o algo hice mal. Incluyendolo a él y excluyendo a mi mamá, con la que esas cosas son claras. Sé que lo que pienso no es cierto.

3.- Soy viejo y moriré pronto. Mi papá es un hombre mayor, tiene 73 años, aunque la verdad no los aparenta ni de chiste. Desde que tengo memoria me dijo que él moriría pronto o que se podía morir en cualquier momento, por lo que cada vez que lo veo entro en la desesperación de pensar que esa va a ser la última vez, lo que me causa depresiones que he ido arendiendo a manejar poco a poco. Desde que era niña nunca ha dejado de pasar.

4.- Compensación económica. El último y a mi parecer más grave comportamiento nocivo de mi padre. Constantemente prefiere suplir el tiempo que no pasa conmigo dándome dinero, lo que antes me era bueno, pero ahora veo que siempre ha sido venderme, vender mi tiempo con él, su atención y su cariño. Esto durante un tiempo me hizo buscar parejas sin dinero, ya que relaciono directamente este recurso con el afecto que no llega. 


Mi Madre:


1.- Cada vez que había una dificultad de cualquier tipo en la escuela en la que estuviera, me cambiaba a otra. Esto me brindó mucha inestabilidad, inseguridad, y por supuesto, falta de amigos.

2.- A veces llegaba furiosa del trabajo, se desesperaba conmigo y me gritaba o me pegaba (ahora lo niega) por absolutamente nada, luego se disculpaba diciendo que yo terminaba pagando los platos rotos y que no era mi culpa (tengo ganas de hacer comentarios sarcásticos, pero perdería la poca objetividad que yo misma pueda tener ante mi situación, así que disculpen la seriedad). Esto me generaba angustias, inseguridad, inestabilidad, miedo/pánico. Entre las cosas que recuerdo, me daban taquicardias y dificultad para respirar, además de que la sangre se me bajaba a los pies cada vez que escuchaba unas llaves sonar... aún me pasa a veces.


3.- Corregirme hasta la risa. Literalmente. Me dijo que no me riera como lo hacía, que lo hiciera desde el abdomen por que era lo correcto. Durante poco tiempo (como un mes) tuve problemas para reír. Ahora mismo no se cuál era mi risa original, simplemente no pude volverla a recordar.
De esa misma forma me corregía todo lo que pudiera naturalmente ser: "Tú deberías ser (Inserte adjetivo positivo aquí)", etc. Trastornó mi forma natural de ser encaminándome a querer ser siempre diferente a lo que soy, lo que por supuesto me ha causado conflictos.


4.- Observar repetidamente mi belleza. Me hacía sentir observada siempre.

5.- Resaltar mis virtudes en presencia de otros. Me hacía sentir señalada y en evidencia, además de desatar la envidia de algunos y la risa de otros, por lo que siempre fui objeto de bulling para mis primos.

6.- El día del juicio final. Así se llamaba el casset que mi mamá me ponía muuuuy seguido en la noche cuando yo tenía 6 años. Se figurará, estimado lector, que era perturbador; y estaría en lo correcto: 
Un hombre centroamericano decía que el hijo de la bestia ya había nacido. Que tenía marcado en el cuerpo el 666, además de mencionar lo que se supone que dice la biblia al respecto. Cabe mencionar que por aquella época yo tenía unas marquitas que me habían quedado por la varicela en el brazo izquierdo, y justamente parecían 3 numeros 6, por lo que, como comprenderán, yo creí que era el hijo del diablo. Me arrepentía constantemente de lo que hacía mal, y magnificaba pequeños actos como masturbarme, sintiendo que iría por ello al mismito infierno. Esto trastornó mi forma de percibir el mundo, me causaba miedos, angustias, no dormía casi nada, pero creo que ella nunca se dio cuenta.
En este mismo cassett se mencionaba que "Dios" SIEMPRE nos está observando, de modo que yo generé un "afuera", todo el tiempo estaba al pendiente de mis movimientos, mis gestos, etc, por lo que me convertí en una persona sumamente histriónica, sólo con el objetivo de "despistar " a "Dios"... menudo chiste.

7.- Involucrarme en las discusiones con mi madrastra, los vecinos, mi papá y cualquier otra persona con la que se le hinchara el huevo tener una disputa... y eran muchas. Me hacía sentir que tenía enemigos y me colocaba en situaciones difíciles que muchas veces no supe manejar.

8.- CRITICAS CONSTANTES. Todo el tiempo, por todo. Esto trastornó mi forma de verme a mi misma, ya que generalmente estaba tratando de cumplir las expectativas que ella tenía o que me hacía pensar que mi papá tenía.

9.- En la adolescencia comenzó a ponerme muchísima atención, toda la que no me dio en mi infancia, al grado de invadir mi intimidad, lo cual para ella no es grave... y quizá para muchos de ustedes tampoco, es probable que para entonces mi percepción haya estado extremadamente alterada, además de por las hormonas, por el trastorno. La cosa es que me sentía acosada. Esta situación se mantiene hasta la fecha, cuando paso más de una semana con ella o cuando paso más de dos semanas sin hablarle recibo agresiones, por que ella necesita estar al pendiente de mi todo el tiempo. A veces no le hablo por que me dan miedo sus reacciones, a la fecha no se cuándo va a estar bien y cuándo mal, lo que, por supuesto, me causa terror.


Estos son los comportamientos de mis padres que creo me encaminaron a tener TLP. 
Detectarlos me da poder, perdonarlos me da fuerza para manejar mis propios comportamientos nocivos.

Los invito a responder ennumerando los comportamientos nocivos de sus padres y qué generaron en uds.